Con los avances en bioimpresión para la sustitución de tejidos, ha sido posible estudiar el comportamiento de estructuras bioimpresas como reemplazo de órganos afectados en los sistemas biológicos humanos e incluso como sustituyentes de ejemplares animales no humanos en estudios clínicos farmacológicos, especialmente de partes óseas, vasculares, cartilaginosas y epiteliales. Sin embargo, su proceso de fabricación aún se considera un desafío para la ciencia.

¿En qué consiste esta tecnología?

Lizeth Vega Medina, directora del programa de Bioingeniería de la Universidad El Bosque, habló con PUBLIMETRO sobre la bioimpresión en la ingeniería de tejidos, sus últimos avances en aplicaciones biológicas y la importancia de la formación de futuros profesionales que puedan continuar contribuyendo a la exploración y desarrollo de esta tecnología.

“La bioimpresión surge del concepto de impresión 3D en donde se generan constructos por medio de manufactura aditiva, a partir de modelos diseñados digitalmente capa por capa. La diferencia entre estas dos técnicas radica en el material de impresión, de modo que, en la bioimpresión se utilizan biomateriales para crear estructuras biológicas que permitan que en algún punto las células proliferen”, explicó.

La bioimpresión es una técnica que aún no se encuentra al servicio de la práctica clínica en Colombia, sin embargo, se ha fortalecido mediante el trabajo investigativo de instituciones de educación superior, que cuentan con equipos de impresión que han permitido aportar a la comprensión y aplicación de la misma, generando grandes avances en la ingeniería de tejidos y medicina regenerativa en el país.

“En el mundo, muchas instituciones de educación superior han investigado en los últimos años cómo emplear esta tecnología y han generado el estado del arte sobre el cual se basan los avances más recientes. A partir de esto se han originado eventos académicos, redes de investigación y otros eventos científicos, con el propósito de divulgar los avances conceptuales y técnicos sobre la bioimpresión, buscando que en el futuro esta técnica pueda ser aplicada en la generación de tejidos biológicos completos”, agregó.

El papel de la Academia

El aporte de los bioingenieros es crucial en este campo, pero para eso, se requiere de la formación de profesionales que participen en el desarrollo de investigaciones que contribuyan significativamente al avance en la aplicación de esta técnica. “Queremos que el país sepa que existe la Bioingeniería y que, aunque somos pocos los programas de formación en pregrado, vale la pena estudiarla y dedicarse a ella. Situaciones como la pandemia del COVID 19 han ratificado la importancia de hacer ingeniería para la vida en todas sus etapas, entendiendo como vida todo sistema biológico que nos rodea y su interacción con el entorno, buscando que el desarrollo tecnológico esté fundamentado en contribuir a la estabilidad, conservación, protección y mejoramiento del entorno”, explicó Vega.

Sus perfiles, además, son tan completos que no solo incluyen la biología y la ingeniería, sino también elementos básicos de la ingeniería electrónica, mecánica, ciencias de la computación, y química. Esta amplitud les permite a los estudiantes y futuros profesionales especializarse en sus áreas de interés y colaborar ampliamente con investigadores en los campos afines de la bioingeniería.

Y es esa misma integración entre programas lo que hizo que la Universidad El Bosque creara hace algunos años, un congreso sobre impresión 3D en salud, que para su tercera versión, reúne los esfuerzos del programa de Bioingeniería con el de Diseño Industrial, para generar un espacio de divulgación capaz de mostrar que es posible contribuir al área de la salud por medio de la impresión 3D.

“El evento se realizará del 31 de agosto al 1 de septiembre y será un espacio para compartir experiencias en torno al uso de tecnologías de fabricación digital aplicadas en el sector salud. Contaremos con expositores de las empresas más importantes a nivel mundial en áreas de medicina, especialidades quirúrgicas, odontología y otros, que nos contarán cómo las aplicaciones de impresión 3D están transformando los procesos de educación, entrenamiento, simulación, desarrollo de guías quirúrgicas, planificación de intervenciones complejas, desarrollo de modelos anatómicos, bioimpresión, impresión 3D de medicamentos, entre otros temas revolucionarios de la industria de la salud”, concluyó.